Luces y sombras en el maquillaje de los ojos

Alguien dijo alguna vez que los ojos son las ventanas del alma. Aunque suene cursi o gastado, esta frase es la que mejor describe todo cuanto podemos decir con una mirada.

Al conocer a una persona, son sus ojos los que primero hacen contacto con los nuestros y tal vez en el momento no nos damos cuenta, pero al evocar en el pensamiento a esa persona, es su mirada la que recordamos y es a través de cómo se expresó con sus ojos, la impresión que guardamos de aquel primer momento.

Allí radica la importancia del maquillaje en esta zona del rostro, pues la correcta elección de colores y formas puede cambiar de manera drástica nuestra expresión.

Actualmente los profesionales del maquillaje utilizan un color único de sombra en todo el párpado, sin embargo las tendencias más clásicas recomiendan el uso de dos tonos de sombras: uno más claro que el otro.

Esta técnica será de gran utilidad en especial si queremos disimular u ocultar ciertos rasgos propios de nuestros ojos.

A continuación te dejamos algunos "trucos" para que tengas en cuenta la próxima vez que utilices maquillaje, siempre de acuerdo a la ocasión, por supuesto:

Ojos caídos: te sugerimos colocar la sombra de manera horizontal desde el centro hacia afuera, y también será muy útil si inclinas el delineador unos milímetros hacia arriba. Por un efecto de ilusión óptica, tus ojos ya no se verán "caídos" sino más horizontales.

Ojos pequeños: En estos casos no hay mucho para hacer desde lo físico, pero tienes innumerables técnicas de maquillaje que pueden provocar ese efecto que buscas. Una solución muy efectiva es colocar sombra clara en la base de la ceja y la sombra oscura por fuera del ojo. Te sugerimos también delinear algunos milímetros por fuera del párpado.

Ojos separados: para lograr el efecto visual de ojos más juntos, la sombra oscura deberá ir en la parte interna del ojo difuminada con la sombra más clara hacia el lado de afuera. Si quieres que luzcan más separados, debes hacer el procedimiento inverso.

El maquillaje facial cuenta con numerosas técnicas, todas igualmente efectivas, que apelando al viejo recurso de la ilusión óptica, logra resultados sorprendentes. Mediante un racional uso de las luces y las sombras, lograrás destacar aquello que más te gusta de tí y ocultar todo aquello que menos te gusta.

También es importante sugerir que tanto mejor serán los resultados cuanto mejor calidad posean los productos que escoges a la hora del maquillaje.