martes, 22 de abril de 2008

Los secretos de un buen maquillaje


En los orígenes del maquillaje, que pueden rastrearse hasta tiempos muy remotos, la finalidad de pintar el rostro era básicamente ritual, para ocasiones ceremoniales o bien para identificar determinados aspectos sociales del individuo (pertenencia a un clan, guerra, etc.)

Con el paso de los años el maquillaje fue ocupando un lugar más importante en el mundo de la estética y hoy en día es una industria tan amplia y variada que factura miles de millones de dólares anualmente.

Pero es común que las jóvenes que están en edad de comenzar a maquillarse no sepan como hacerlo o simplemente cometan errores que podrían evitarse con algunos tips básicos.

Aquí te mencionaremos lo que debes saber para armar tu propio set de maquillaje y no fallar en el próximo intento.

Base: es imprescindible contar con una buena base de maquillaje pues su función es unificar el tono de la piel. Las hay de tipo compacto, cremoso o líquido, de todas las marcas, y específicas para cada tipo de piel. No te preocupes por alergias, hoy en día todos los productos de maquillaje son hipoalergénicos.
Corrector de ojeras: pide asesoramiento sobre el tipo de corrector más conveniente para tu piel y para el tipo de ojeras que tengas (leves o intensas). La función del corrector es brindar iluminación y uniformidad a tu cara.

Polvos: Se usan para quitar los brillos de la llamada zona T (pómulos, nariz y frente) que por su contextura más grasa que el resto del rostro, requiere que se apliquen polvos mate. A pesar de la variedad existente en el mercado, te recomendamos los polvos transparentes.


Sombra de ojos: son fundamentales para destacar la mirada y dependiendo del color que elijas será el efecto que obtengas.

Lápiz delineador: el más usado es el de color negro, pues sirve para intensificar la mirada, ampliar o reducir el tamaño del ojo (por ilusión óptica) y dar una "terminación" más prolija a tus ojos.

Rubor: se colocan preferentemente en pómulos y en aquella zonas que quieras ocultar. Te recomendamos que comiences utilizando colores tierra, son infalibles.

Rouge: es infinita la cantidad de opciones que tienes en materia de lápices labiales. Un tip a tener en cuenta es elegir el color que más se parezca al color de tus labios o un tono más. Prueba con varios colores hasta descubrir el que te hace sentir más segura y cómoda.

Brillo: una vez concluido el maquillaje, debes aplicar brillo sobre tus labios. Los hará verse más jóvenes, lubricados y sensuales.

1 comentario:

Anónimo dijo...

BUEENAS IDEEAS!!
NO SIEMPRE ES FÁCIL MAQUILLARSE!!!